maeknapnougel El pesto de aguacate: una variante untuosa, tropical y vegana del pesto tradicional.
En mi dieta diaria nunca falta el aguacate, ese fruto tropical repleto de bondades, con un sabor suave, y una textura cremosa. Sólo, con otras verduras, acompañado de frutos secos, en forma de batido, o de salsa pesto.
Sí, en salsa de pesto. La textura y voluptuosidad de este fruto verde lo convierten en una alternativa estupenda, muy sana, y completamente vegana de la ubicua salsa pesto italiana.
¿Sus beneficios? Por doquier. El aguacate es, de por sí, una fruta repleta de bondades y propiedades beneficiosas. Pero sí además le añadimos la albahaca, los piñones, el ajo, y el aceite de oliva virgen extra, se convierte en un auténtico tesoro curativo. En una verdadera poción mágica.
Por su alto contenido en vitamina E, el pesto de aguacate revitaliza y suaviza la piel. Hidrata, y embellece el cabello.
Junto a sus grasas saludables, esta vitamina cuida el corazón. Fortalece el sistema inmunitario, y depura los vasos sanguíneos, eliminando los posibles residuos de colesterol maligno.
Abundante en minerales, y poseedora de Omega 3, esta crema vegetal nutre el sistema nervioso. Y protege la salud del cerebro, mejorando, a su vez, la concentración y memoria del individuo.
Es, en definitiva, una solución ideal para:
- purificar e hidratar el organismo,
- regenerar y suavizar los tejidos dañados por los radicales libres y toxinas ambientales,
- aportar energía natural, de forma sana,
- mejorar la atención y memoria
- saciar el apetito.
A mí me gusta mucho acompañar tallarines integrales con esta untuosa salsa pesto de aguacate. Con trocitos de nuez, bolitas de mozzarella vegana, tomates cherry y hojas de albahaca, el resultado final es, cuanto menos, exquisito.
Un deleite suave y sabroso para el paladar. Una cura mágica para la eternidad. Una alternativa vegana espectacular.
Mientras ingiero este delicioso manjar, practico la alimentación consciente. Medito sobre los milagros que están teniendo lugar en el interior de mi cuerpo, y en el plano colectivo:
«Al saborear y tragar este pesto de aguacate suavizo la textura de mi piel, hidrato mi cabello, protejo mi corazón, y purifico mi organismo. Respeto el medio ambiente, protejo la vida animal, y me alimento de la naturaleza ”.
